El próximo sábado 22 de marzo se celebra el Día Mundial del Agua. Una fecha propicia para reflexionar sobre las oportunidades de inversión que se esconden detrás del oro azul, ante un contexto en el que la población mundial sigue creciendo y la demanda no cesa de aumentar. Es evidente que el sector privado debe responder a estos desafíos a través de tecnología e infraestructuras que permitan gestionar de forma más eficiente el suministro.
Estas soluciones innovadoras abren la puerta a interesantes oportunidades de inversión. Y muy rentables en el largo plazo. Así ha quedado demostrado en los últimos diez años, en el que el índice S&P Global Water Index –compuesto por las 50 mayores compañías relacionadas por el sector- ha batido con creces otros indicadores como el Thomson Reuters Global Oil & Gas o incluso el S&P 500.
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