En todo Veracruz y de manera específica en Córdoba las plantas de tratamiento han sido subutilizadas, además de que están funcionando por debajo de la norma, aseguró Olga Díaz-Ordaz Terrones, presidenta de la Fundación Chalchi.
Y es que sólo el 60 por ciento de las plantas de tratamiento que se han construido en el estado de Veracruz están funcionando, pero en algunos casos ni siquiera se pusieron en marcha, otras están en abandono o presentan fallas, lo que ocasiona que las aguas negras sean vertidas a las playas, ríos y arroyos, agravando aún más el problema de la contaminación.
"Se ha hecho una inversión, por primera vez, histórica, pero derivado de un llamado de muchos años de varias organizaciones ciudadanas, quienes hemos exigido que se apliquen recursos al tema ambiental; poco a poco se ha hecho, pero todavía estamos incipientes y necesitamos que el recurso sea bien destinado, sobre todo en el caso de las plantas de tratamiento".
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